Las series de mi vida

Ya he hablado en otras ocasiones de las series que sigo en la actualidad y de las series que me gustaría volver a ver, por que no he vuelto a verlas desde que era pequeña. Pero todavía no había hablado de esas series que realmente me han marcado, esas de las que no me perdía un episodio, las que he visto en VOS y después dobladas, las que poco a poco fueron conquistándome hasta hacerse imprescindibles o las que hacían que me acostara tarde pues la reponían de madrugada en La 2. Para muchos serán series ñoñas, o para «chicas», pero crecí viendo Fama y Verano azul y he pasado buenos ratos viendo Dawson crece, eso no puedo cambiarlo, tampoco quiero, me encantaba ver bailar a Leroy Jhonson y la temprana madurez de Dawson. Mis primeros recuerdos televisivos son de las sobremesas del domingo viendo La casa de la pradera y las tardes del sábado pendiente de los lagartos de V, esos recuerdos forman parte de mi vida y de mi crecimiento personal… para bien o para mal.
Estas son las que recuerdo con mayor cariño:

Perdidos (Lost, 2004-2010).

La serie, con mayúsculas, podrá gustarnos o no su final pero nadie pone en duda que como serie ha marcado una época, de hecho, por primera vez un episodio final se emitía en directo y de manera simultanea a casi 60 países.
Me ha hecho pasar grandes e inolvidables momentos teorizado sobre las posibles explicaciones que ni siquiera el episodio final consiguió resolver, o quizá sí, había que estar muy atento a todos los detalles, creo que prácticamente todo quedo explicado, de una forma más o menos extensa. De todas formas, quien necesita explicaciones si hemos conocido a Sawyer, Hugo, Kate, Said, Charlie…